Desde su designación como presidente de la COP28, hace casi un año, la polémica ha rondado al sultán Ahmed Al Jaber por su vínculo con los hidrocarburos. Aunque en su intensa gestión preparatoria a la cumbre del clima moderó su declaración inicial de no “apagar” aún la energía fósil, el también director ejecutivo de la Compañía Nacional de Petróleo de Abu Dhabi lo volvió a hacer. Antes de iniciar la cita anual de la ONU señaló que la demanda de eliminación gradual de los combustibles fósiles para frenar la crisis climática no tiene «base científica».
Afirmó que no existía «ninguna ciencia climática ni ningún escenario que diga que la eliminación progresiva de los combustibles fósiles es lo que permitirá alcanzar los 1,5 grados Celsius». Al Jaber, incluso emplazó a los asistentes: “Muéstrenme la hoja de ruta para una eliminación gradual de los combustibles fósiles que permitirá un desarrollo socioeconómico sostenible. A menos que quieran llevar al mundo a las cuevas”.
Los comentarios han sido “increíblemente preocupantes” y “rayan la negación climática”, dijeron los científicos, según The Guardian y The Center for Climate Reporting. Al Jaber hizo los señalamientos en respuestas a las preguntas de Mary Robinson, presidenta del grupo de Ancianos y ex enviada especial de la ONU para el cambio climático, durante un evento en vivo en línea a finales de noviembre.
Robinson lo desafió aún más, diciendo: «Leí que su empresa está invirtiendo en muchos más combustibles fósiles en el futuro». Al Jaber respondió: “Estás leyendo tus propios medios, que son parciales y erróneos. Te digo que soy el hombre a cargo” de la cumbre climática.
Una vez publicada la opinión del sultán, el enviado climático de Estados Unidos, John Kerry dijo a POLÍTICO que puede requerir una «aclaración».
La declaración del presidente de la COP28, desestimando el impacto directo de los combustibles fósiles en el calentamiento global y la crisis climática -reconocida y omitida por las propias petroleras- no perturbó el apoyo de Kerry a Al Jaber.
«Mire, él tiene que decidir cómo quiere expresarlo. Pero la conclusión es que esta COP debe comprometerse a eliminar gradualmente todos los combustibles fósiles», aseguró el enviado climático de Estados Unidos.
“Lo que creo que estaba diciendo, y tal vez salió mal, no lo sé. Creo que estaba diciendo que la ciencia no dicta la metodología que hay que utilizar”, dijo Kerry. “Hay que elegir entre muchas formas diferentes de hacerlo. Tal vez suceda mediante la captura de carbono, tal vez no”, comentó en referencia a la tecnología, en gran medida no probada, que elimina las emisiones antes de que entren a la atmósfera.
El enviado climático de Estados Unidos animó a la gente a escuchar las palabras de Al Jaber en la propia COP28. «Lo escuché decir en sus comentarios de apertura ante toda la COP que está comprometido con 1,5 grados. Y que necesitamos hacer todo lo necesario para implementarlo”.
Al respecto, la ministra española de Transición Ecológica, Teresa Ribera, recalcó desde la cumbre que es «imposible» cumplir con los objetivos del Acuerdo de París sin una «fuerte» disminución del consumo de combustibles fósiles. En la misma línea se pronunció la Comisión Europea.
«Tenemos claro lo que dice la ciencia», señaló el portavoz de Acción Climática del Ejecutivo comunitario, Tim McPhie. Se remitió al mandato oficial de negociación de la UE para esta cumbre, que subraya que «el cambio hacia una economía climáticamente neutra en consonancia con el objetivo de 1,5 ºC. Ello requerirá de la eliminación progresiva a escala mundial de los combustibles fósiles».
Amnistía Internacional denunció que «no es nada alentador» que el presidente de la COP28 ponga «en entredicho» la base científica que existe sobre el impacto de los combustibles fósiles en el clima.
Mientras tanto, la presidenta de la organización en España, Beth Gelb, criticó que exista «negacionismo» acerca del cambio climático. Una cuestión que consideró «la mayor amenaza a medio plazo y quizás no tan a medio plazo de nuestros derechos».
Asimismo, Greenpeace insistió en que «la ciencia es clara», y esta refleja que «cada gramo de petróleo, carbón y gas que quemamos significa más calor y crisis climática», según han escrito en un mensaje en redes sociales.
Ante el revuelo causado por sus opiniones, Al Jaber compareció ante la prensa acompañado de Jim Skea, presidente del IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos para el Cambio Climático de Naciones Unidas), para explicar lo sucedido. “Se han sacado de contexto estas palabras”. Y adicionó: “soy ingeniero y la ciencia está en el centro de mi persona y es lo que me ha hecho avanzar”.
Al Jaber reiteró que “la estrella que guía esta presidencia son los 1,5 grados” y “créanme ahora brilla más que nunca en esta consecución”, advirtió. Las palabras del ministro de energía emiratí eran muy esperadas tras publicarse una charla en línea en la que ponía en duda la evidencia científica tras el cambio climático, recogida por The Guardian.
Durante su intervención indicó: “quiero dejar clara mi postura”. Y “acabar con los combustibles fósiles es esencial y esa transición tiene que ser clara, responsable y organizada”.
El presidente de la COP28 comentó este lunes que está “bastante sorprendido con los constantes intentos de despreciar y menoscabar el trabajo de esta presidencia”.
Manifestó que “más allá de los titulares se están consiguiendo cosas ilusionantes e interesantes”. En los cuatro días de transcurso de esta cumbre climática se han conseguido numerosas declaraciones, todas ellas voluntarias. Pero, según numerosas organizaciones ecologistas, “en ninguna de esas declaraciones reconocen el fin de los combustibles fósiles”. Frente a esto, el presidente de la COP28 pidió “déjennos espacio y tiempo para conseguir la mayor ambición que se plasmará a finales de esta COP”, en Dubái.
Hay que esperar a las conclusiones finales de esta controvertida cumbre.